Hoy, alrededor de la una de la madrugada del día, una veintena de campesinos y campesinas en huelga de hambre –la mayoría de ellos, adultos mayores- fueron desalojados a empeñones por policías y miembros del serenazgo de Lima, mientras descansaban de manera pacífica en puertas de la Defensoría del Pueblo.
Pero no fue el único atropello. Luego de ser desalojado los agricultores fueron llevados a la Comisaría de San Andrés en calidad de detenidos, sin contar con una orden de detención, en donde varias compañeras campesinas fueron golpeadas por los policías, siendo una de las víctimas la dirigente Niria Altamirano, presidenta de Federación Departamental de Ica-FEDAICA, base de la CNA.
Hechos que fueron repudiados por Antolín Huáscar, presidente de la CNA, quien sostuvo que “estos abusos que han sufrido nuestros hermanos y hermanas campesinas sólo confirman la prepotencia del gobierno, que prefiere mandar a los policías para maltratarlos en vez de darle solución a sus demandas”.
Añadió que ya eran 22, los días en que los agricultores se encontraban en huelga de hambre, esperando que el Tribunal Constitucional se pronuncie de una vez por todas sobre la constitucionalidad de la ley PREDA y hasta ahora no había ninguna respuesta. Señalando que este tipo de actitudes sólo provocaba el levantamiento del pueblo.
Debido a este violento desalojo y a las agresiones que han sufrido los hombres y mujeres del campo, el representante legal de la CNA, el abogado Wilber Quispe va a realizar la denuncia en la 4º Fiscalía Provincial Penal de Turno por delitos de secuestro, robo y lesiones graves.
Confederación Nacional Agraria 